Viviendas tuteladas para discapacidad: qué son y cómo ayudan en la comunidad

Las viviendas tuteladas para personas con discapacidad han sido creadas para que  las personas con una dificultad en común puedan convivir, ayudarse y adaptarse a la vida social. Todos tenemos derecho a llevar una vida independiente, cómoda y segura. Por eso, los pisos tutelados son un ambiente ideal para las personas con discapacidad.

De hecho, muchas personas encuentran una oportunidad en una vivienda tutelada y este es el motivo por el que merece la pena conocer cada detalle sobre este tipo de apoyo.

En el siguiente post, conocerás qué es una vivienda tutelada, cómo está organizada y de qué manera ayudan en la comunidad. ¡Sigue leyendo!

¿Qué son las viviendas tuteladas?

Se trata de viviendas o pisos diseñados para que las personas con alguna discapacidad física o intelectual puedan convivir e independizarse de manera apropiada y de acuerdo a sus necesidades. Una vivienda tutelada cuenta con las dimensiones, habitaciones y características precisas para que las personas que habitan en ella puedan desarrollar sus actividades.

El objetivo de las viviendas tuteladas no es solo ofrecer un refugio a las personas con discapacidad, sino, también, ofrecer un ambiente bueno y adecuado para que cada individuo logre la autogestión y desarrolle actividades cotidianas con naturalidad.

Un hogar tutelado puede ser una estancia permanente para personas con discapacidad o puede ser una vivienda temporal que permita al individuo desarrollar habilidades para integrarse de manera óptima a las labores sociales habituales.

¿Quiénes tienen acceso a una vivienda tutelada?

Existen algunos criterios para admitir a un grupo de personas en una vivienda tutelada. Todo dependerá del tipo de discapacidad que tengan en común y de otros factores que a continuación te explicamos:

• Tener una discapacidad física e intelectual diagnosticada por un especialista avalado.
• Ser mayor de 18 años y que se compruebe la necesidad de un alojamiento alternativo.
• Que el grado de discapacidad sea, al menos, un 33% según su certificado de discapacidad.

Una vez cumplidos estos requisitos se evaluará a qué vivienda tutelada asignar a la persona según su ubicación geográfica, perfil social y perspectivas de adaptación.

Ubicación y características de las viviendas tuteladas

Los pisos tutelados se ubican generalmente en zonas urbanas para facilitar a sus ocupantes el acceso a servicios básicos y a diversos medios de transporte. Además, es más cómodo para los supervisores inspeccionar con frecuencia estas viviendas si están localizadas en zonas de fácil acceso.

Es fundamental que estén conectadas a las diferentes redes de suministros de servicios básicos como agua potable, energía eléctrica y servicios de conectividad. Además, es importante que una vivienda tutelada sea visitada con frecuencia por organizaciones de apoyo y orientación que ayuden a los habitantes de este espacio a mantener la armonía y conseguir sus objetivos de vida.

Capacidad máxima y mínima de una vivienda tutelada

Existen normas establecidas para regular de manera eficiente y conveniente la capacidad mínima y máxima de personas en una vivienda tutelada. En ningún caso, una vivienda tutelada podrá albergar a menos de 4 personas o a más de 7.

La infraestructura de la propia vivienda también puede ser una limitante para que más o menos personas puedan habitar en ella. Otro de los impedimentos o variables a considerar para determinar el número de habitantes de un piso tutelado es la condición física e intelectual de los miembros de esta comunidad.

Los criterios de admisión y de capacidad de personas en una vivienda tutelada para discapacidad obedecen a la intención de preservar la integridad, comodidad y desempeño adecuado de sus actividades. 

Servicios que se pueden encontrar en un piso tutelado

Además de los servicios básicos que todo hogar necesita para que sus ocupantes se sientan cómodos, en una vivienda tutelada para discapacidad deberían existir servicios especializados. Entre ellos cabe destacar los siguientes:

• Asistencia, apoyo y supervisión: los organismos especializados, a través de la supervisión, deben ofrecer apoyo a los habitantes de las viviendas tuteladas con el fin de acelerar su inserción social.
• Alojamiento y manutención: en los casos en que sea necesario, se ofrece ayuda en forma de manutención para apoyar al desempeño oportuno y cómodo de las actividades.
• Actividades recreativas y de convivencia: se planifican acciones que estimulen la convivencia entre los miembros de la vivienda tutelada, así como el fomento de la independencia y la autogestión.
• Actividades para la integración comunitaria: no solo se procura involucrar a los habitantes de la vivienda entre sí, sino también integrarlos con la comunidad a la cual pertenecen.

Requisitos de organización

Con el fin de crear valores que refuercen los conocimientos y las aptitudes de cada individuo, se establecen algunos requisitos mínimos de convivencia y organización dentro de las viviendas tuteladas para discapacidad.

Estos requisitos también estimulan su capacidad de organización y de resolución de problemas en su día a día. A los habitantes de una vivienda tutelada se les pide:

• Mantener la limpieza y el orden del piso o vivienda.
• Completar una lista de compras creada y gestionada en conjunto.
• Repartir tareas de forma organizada y equitativa.
• Procurar una comunicación permanente y activa para la resolución de problemas.

¿De qué manera ayuda una vivienda tutelada a la comunidad?

El apoyo que se le presta a las personas con alguna discapacidad se traduce en un beneficio colectivo que la comunidad en general agradece. Las viviendas tuteladas son el punto de partida para que las personas con alguna discapacidad adquirida recientemente puedan aprender a ser independientes.

Cuando una discapacidad motora llega a la vida de una persona de forma inesperada, el proceso de adaptación puede resultar muy traumático. Sin embargo, al estar en compañía de otras personas con discapacidades similares, el nivel de motivación aumenta de manera inmediata.

Por otra parte, los pisos tutelados incrementan la confianza y la autoestima de las personas que han sido puestas en segundo plano por alguna discapacidad intelectual. Así, convivir con personas que enfrentan las mismas dificultades, les despierta sentimientos de empatía hacia los demás.

¿Cómo apoyar de mejor manera a los habitantes de una vivienda tutelada?

La tecnología puede ser de gran ayuda para las viviendas tuteladas si se utiliza de manera eficiente y planificada.

Desde ADD Informática ponemos a tu alcance una de las mejores opciones tecnológicas para automatizar procesos administrativos y operativos de los pisos tutelados: ResiPlus^®.

Estamos comprometidos con el apoyo a la gestión y el buen funcionamiento de este tipo de centros sociales, por lo que nos esforzamos por proporcionar todas las ventajas funcionales que una vivienda tutelada para discapacidad necesita con el fin de cumplir de manera apropiada sus objetivos.

¿Necesitas más información? Contáctanos.